martes, 23 de noviembre de 2010

EL NIÑO DE 7 A 14 AÑOS: LOS 9 AÑOS, “EL RUBICÓN”



Taller abierto para padres y maestros. 
A cargo de la Profesora Úrsula Vallendor.
Viernes 26 de noviembre de 18 a 21 hs y sábado 27 de 10 a 13hs.
En Escuela “La Semilla”, El Lazo 150 (alt. Av. Bustillo 11.400)
 
 
Cada edad tiene su particularidad, pero alrededor de los nueve años, los niños pasan por un cambio particularmente profundo, referido por los maestros Waldorf como el “rubicón”, el “punto de no retorno” de la infancia.
 
Alrededor de los nueve años nos empezamos a separar del mundo. Nos alejamos, nos hacemos independientes y empezamos a cuestionar todo lo que antes dábamos por hecho.
 
Rudolf Steiner describe cómo el niño de nueve años experimenta en un nivel espiritual lo que el niño de tres años experimentó la primera vez que dijo “Yo”. Es ahora cuando surge una experiencia de individualidad independiente de todo lo demás. Esto conlleva el primer sufrimiento por soledad, pero también la primera dicha de estar con uno mismo. Trae la primera capacidad de entender la muerte como una realidad. Podría decirse que es la primera vez que nos sentimos tan inseguros de nuestra relación con la Naturaleza, con la Eternidad, con los otros, con nosotros.
 
¿Cómo acompañar a un niño de nueve años a restablecer su relación consigo mismo y con lo que lo rodea?
 

lunes, 22 de noviembre de 2010

LA ESQUILA

Acompañados por el Maestro Damián y algunos papás, los niños del 1º grado de "La Semilla", presenciaron un día de esquila en el campo.


Ana, una de las mamás, nos cuenta: "...Fuimos a ver como Juan, un señor muy amable que vive cerca de la escuela, esquilaba una oveja que es la mascota de sus nietos. Lo hizo con paciencia y amor, cuidando a la oveja, de no lastimarla, y también a los chicos y adultos que observábamos su tarea."

sábado, 25 de septiembre de 2010

Pedagogía Waldorf

Pedagogía waldorf en Argentina
La primera escuela de pedagogía waldorf en Argentina fue la Rudolf Steiner, fundada en 1940 en Florida, provincia de Buenos Aires. Actualmente en nuestro país, hay más de veinte establecimientos que se rigen por este método de enseñanza.

Principios y fundamentos de la pedagogía Waldorf
La Pedagogía Waldorf pone especial atención al hecho de que en la enseñanza se encuentren entretejidos puntos de vista científicos y estético-artísticos, junto con aquellos aspectos relativos al respeto profundo y la admiración por el mundo. La enseñanza artística, así como también la artesanal y la técnica ocupan un lugar de importancia. No sólo tienen su propio espacio curricular sino también forman parte de las estrategias cotidianas que el maestro aplica en el aula para motivar y desarrollar contenidos.
Creada por el filósofo autríaco Rudolf Stenier en 1919, esta pedagogía se fundamenta en una concepción del ser humano basada en la Antroposofía (Ciencia del Hombre).
La pedagogía Waldorf enfatiza  en el juego, el cual se presenta al niño con un orden coherente para incentivar distintas áreas según sus capacidades madurativas: el conocimiento, la afirmación, la confianza, la voluntad, la comunicación y la cooperación con su prójimo, por ejemplo.
La vivencia es uno de los aspectos fundamentales: en la presencia del hacer –la voluntad- se facilitan los aprendizajes más significativos para los niños.



Características sobresalientes
El maestro de grado acompaña a los niños durante todo el período, que concluye al iniciarse el secundario.
La enseñanza se organiza por épocas, no hay un horario mosaico. El área de conocimiento se profundiza durante  aproximadamente 3 ó 4 semanas y luego se pasa a la siguiente.
El alumno va confeccionando su propio cuaderno de aprendizaje a lo largo del período lectivo. El acercamiento al pensamiento abstracto, con textos y otras fuentes de información es progresivo evitando la intelectualización precoz en los niños.
El maestro evalúa el proceso de aprendizaje a través del contacto cotidiano con los alumnos.
Se incorpora el arte en variadas expresiones como un medio de aprendizaje en las materias curriculares. El canto, la música, el movimiento y las manualidades no sólo tienen sus clases especiales sino que son recursos en matemática, lengua o ciencias para la elaboración de conocimientos específicos.
Los niños participan en talleres de distintos oficios como carpintería, cocina, tejido y jardinería, entre otros.
En cuanto idiomas, se les proporciona desde primer grado el contacto con lengua extranjera, procurando con ello que  niños vivencien el “genio de la lengua”, sin buscar un bilingüismo prematuro.
Se fomenta el respeto por los ritmos y cursos naturales de los acontecimientos.
Los padres tienen una participación muy importante en la vida de la escuela, ya que proveen los medios necesarios para que ésta pueda funcionar. Participan junto con los maestros en comisiones con diferentes tareas (administración, eventos, comunicación, mantenimiento, etc).

"fiesta de los farolitos"

Espiritualidad y Religión
La educación Waldorf está implícitamente permeada de espiritualidad; cultiva la devoción natural del niño y el respeto y admiración por la naturaleza y los seres humanos. El curriculum incluye un amplio espectro de tradiciones religiosas sin favorecer una por sobre otra. Se respeta el credo religioso de cada familia.

Celebración de Festividades

Los niños vivencian de manera intuitiva los procesos de la naturaleza en el cambio de las estaciones del año. Las festividades anuales son para ellos momentos culminantes de su religiosidad natural. A cada estación y a cada edad se asocian cuentos, historias, artesanías y canciones, de las que abundan en todas las culturas, y que profundizan la unión del niño con la naturaleza y con todo su entorno, despertando en él una leve noción del enigma del ser humano.
Cada escuela decide individualmente que celebraciones concuerdan mejor con las necesidades de sus alumnos en particular, adaptándose a las tradiciones históricas y culturales de las comunidades que las rodean.
 
¿Todas las escuelas Waldorf son iguales? La mayoría de las escuelas pertenecen a un movimiento pedagógico reconocido mundialmente, incluso por la UNESCO. Pero cada una de ellas responde al principio de la libertad en el ámbito de la educación; así la forma en que se imparten las clases, y la manera de organización interna es diferente, ya que se conforman distintas comunidades de niños, padres y maestros.